El otro día andaba viendo vídeos musicales en la TV y me encontré con este grupo.
La primera sensación fue de incredulidad ante el cantante: de donde habían sacado a semejante individuo, y como era posible que el hermano feo del hermano feo de los Calatrava hubiese estado tanto tiempo desaparecido (por favor, acudid a la secuencia del minuto 1'30'' del vídeo para saber a que me refiero)...
Luego me miré al espejo y empecé a escuchar la canción. Y lo siguiente fue hacerme con el disco, y no dejar de escucharlo durante unos días.
A veces la vista nos juega malas pasadas. Estamos tan acostumbrados a que el mundo actual sea pura imagen que se nos olvida quienes somos, como somos y que es lo importante de cada cosa.
Porque tampoco voy a ser un inocentón pensando que lo único que importa es el interior, a mi también me importa la imagen y me entran las cosas por los ojos. Pero a la hora de escuchar una buena canción ¿a quien le importa que Mick Jagger sea el sueño húmedo de un chimpancé? Si es capaz de hacer canciones como "(I can't get no) Satisfaction" o "Painted Black", por mi puede ser directamente un cuadro cubista en movimiento. Si lo que voy a hacer es escucharle, que su voz esté bien, lo demás son complementos más o menos importantes, pero complementos.
Y está claro que en el mundo de las ventas que compartimos, la imagen es fundamental. Pero quizás ese mundo sea el error, digo yo, así que me quedo con el talento, sea el que sea (que si eres modelo o posas de alguna forma, igual ese es tu talento, no lo discuto).
Os dejo a los 1990s, un grupo fantástico con una imagen personal... difícil:
Feliz fin de semana...
viernes, 14 de diciembre de 2007
1990s
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario