martes, 13 de mayo de 2008

Born in the USA.

Previo: Durante todo este post hablaré de "americanos" y "antiamericanos" refiriéndome en realidad a estadounidenses y antiestadounidenses. Pido perdón y lamento las sensibilidades que pueda herir con ello, pero es un lenguaje que tengo demasiado asumido (y que está totalmente asumido en España) como para renunciar a él. No me lo tengan en cuenta, aunque sé que no es correcto.

El otro día salía en "El Mundo", en su sección digital, un artículo comentando la película que Oliver Stone ha realizado sobre George Walker Bush, en realidad un post sacado de uno de sus bloggers oficiales.
El artículo era una crítica a las posturas extremistas que convierten a los opuestos políticos en el maligno. Y, dado que hablaba de la película, lo hacía desde la posición del que, por criticar a su presidente, es tildado rápidamente como antiamericano. Pero en una de sus frases, venía a decir acertadamente que había "gorilas" en ambos lados.
Lo leí y leí los comentarios que se estaban publicando, y no pude evitar poner el mío (con otro nick, eso sí, inventado para la ocasión). Y me preocupé mucho al ver el tipo de reacciones que el artículo había provocado...

Existen muchos tópicos sobre los EEUU. Algunos son más ciertos que otros, pero evidentemente ninguno es aplicable al 100% de los ciudadanos de un país que tiene unos 300 millones de habitantes. Yo tuve la suerte de visitarlo hace ya unos años, y saqué mis propias conclusiones al respecto, mis tópicos personales sobre ellos basados en lo observado. Aunque admito que serán opiniones sesgadas a un núcleo de población eminentemente rural o de ciudad pequeña:

- Los americanos no son tontos, ni mucho menos. Son tremendamente prácticos, y priman eso sobre aspectos teóricos.
- Los americanos de clase media son bastante incultos en casi todo lo relacionado con el exterior de su país. Simplemente les trae al pairo lo que suceda más allá de sus fronteras. Y su concepción de si mismos como nación superior al resto es algo tan íntimamente asumido que ni se dan cuenta de que pueden resultar ofensivos al hablar con gente de otros países.
- El americanismo de un americano se inculca desde la escuela, forjando a fuego en su mente una serie de conceptos que defenderán a muerte como parte de su fe. Y, de hecho, son tan religiosos que el mismo hecho de tratar con un ateo es algo que suele chocarles. "In God We Trust" no es solo un lema en sus monedas, es parte sustancial de ellos mismos.
- Los americanos medios tienen unas inquietudes políticas mínimas. Y generalmente suelen ser más locales y regionales que nacionales o, mucho menos, internacionales. Surge de la comodidad que produce vivir en un país tremendamente rico. Están adormecidos para no darse cuenta de que su riqueza depende de la pobreza de muchos países en el exterior. Y, consciente o inconscientemente, prefieren no planteárselo.
- Los americanos medios han sido "simplificados" para ser especialmente productivos. Pero son trabajadores y muy dedicados. Y cuando deciden hacer algo, suelen ser muy concienzudos para lograrlo. En deportes, por ejemplo, serán los rivales más duros, porque sabrán sacrificarse por su objetivo y porque han sido educados para competir. Aunque a veces les pueda perder su individualismo, cuando se trata de representar a su país se transforman en bloques muy eficientes.


El caso es que, dicho todo esto, también existe el tópico de que el americano es muy inculto y bastante cenutrio. Y se pueden incluso encontrar americanos dispuestos a darle la razón.
En el vídeo que os ofrezco, éste sí muy sesgado porque evidentemente es una selección de grandes intelectuales que (confío) no representan al americano medio, tenéis algunas muestras:



Dura unos 9 minutos, pero no dejéis de verlo (gracias J.G.S)...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Impresionante, aunque supongo que estará sesgada la entrevista, aunque más que una suposición es un deseo. De todas formas, en España ocurre lo mismo, la mayoría de la gente no sabe muchas cosas básicas, sobre todo las nuevas generaciones que vienen.

oligoqueto dijo...

La verdad es que lo de la cultura que observas depende mucho de por donde te muevas, a quién frecuentas y que tipo de educación has recibido.

Y sí, es probable que los que vienen por detrás sean parecidos. Ya hice una mención al respecto...