martes, 1 de julio de 2008

Paso de ti.

Lo juro, lo intenté. Esta vez había escogido una película seria y estaba decidido a ver algo con un mínimo de prestigio, pero el destino quiso que acabara viendo de nuevo una comedia romántica.

Según lo que leí en el periódico, en mi cine de referencia ponían "Antes que el diablo sepa que has muerto" a la 1:00. Pero mi cine de referencia tiene más de una franquicia en Madrid, y acabé en la que no correspondía. Así que me metí a ver "Paso de ti", por no ver otras que, a lo mejor, puede que interesen a mis habituales compañeros de cine.

Pero confieso que no me arrepiento. Aun a riesgo de ganarme un merecido prestigio de amante de la comedia romántica, y aunque luego nadie tome en serio mis críticas cinematográficas, tengo que decir que me gustó bastante la película. Que es descarada y divertida, un poco cafre y muy poco ñoña. Y que tiene hasta trasfondo y no es solo algo entretenido con final feliz.

Producida por el llamativo Jude Apatow, su título original ("Forgetting Sarah Marshall") da una idea más clara de lo que nos vamos a encontrar; un tipo despechado que quiere olvidar a Sarah, su exnovia. Pero cuando se lleva cinco años con ella, resulta difícil. Si encima ella es una estrella de la televisión, aun es más complicado. Y resulta casi imposible cuando se hace público que se ha liado con un cantante de éxito...

Ante la crisis emocional que ello le provoca, Peter Bretter, nuestro protagonista, decide huir a Hawaii. Y buscando alojamiento en un hotel de lujo de la isla de Oahu, se encuentra con su ex y su actual novio, disfrutando el uno del otro en el paraíso tropical.

Peter sufre, pero no puede soportar la idea de marcharse y dejar que Sarah piense que está mal. No, él se queda y acaba haciéndose amigo de buena parte del staff del hotel. Además de encontrar algo de diversión y buena parte de su propia personalidad, perdida en los años de relación con Sarah. En el proceso Peter se reconcilia con la verdad de su vida y con las ganas de perseguir sus sueños, mientras Sarah descubre el miedo de ver escaparse los suyos y algunas mentiras en su propia existencia.


La película me divirtió bastante porque es gamberra sin llegar a ser de mal gusto, y porque presenta unos personajes con flaquezas que no son habituales en las comedias románticas. Incluso el rockero en plan místico que recuerda mucho a Jack Sparrow tiene sus dobleces intelectuales y sentimentales. Aquí todos son en parte culpables de sus desdichas, y las situaciones que se plantean suceden sin que finalmente unos queden como buenos y otros como malos.

Por otro lado, situar la acción en Hawaii le da un toque de dejadez que le viene muy bien a la historia, y permite enfrentarnos a personajes secundarios muy divertidos. No busca tramas cursis, como suele ser habitual en este tipo de cine, y consigue parecer un producto diferente. Por ejemplo, me llamó la atención que hubiese varios desnudos integrales a lo largo de la película, casi siempre frontales y del propio protagonista. O que el lenguaje fuese directo y a veces fuerte. Natural, si queréis. Una naturalidad que se expande por toda la película.

Por eso, me quedo con la buena sensación que me dejó al salir del cine. Con su falta de pretensiones y su humor incorrecto pero no ofensivo. Y con el buen trabajo de sus protagonistas, Jason Segel, Kristen Bell, Mila Kunis y Russell Brand, que están muy guapas ellas y muy graciosos ellos.

Una buena opción para pasar un buen rato.

1 comentario:

Rara Avis dijo...

En honor a la verdad, debo decir que antes iba al cine muchísimo, me veía todas las peliculas pero ahora, mi presupuesto no me llega más que para ver aquellas peliculas especialmente escogidas...

Está pelicula la veré...pero se suele decir es carne de Emule, ya te contaré que me parece...

Besos