miércoles, 19 de marzo de 2008

La casa del vino, de la coca y más...

Con este título en principio tan difícil de interpretar me estoy refiriendo a la amiga Amy Winehouse, una artista de voz prodigiosa que cada día es más famosa, aunque, por desgracia, no sea solo por su arte...

A Amy se la conoce sobre todo porque, igual que es capaz de ser la intérprete con la voz más interesante del momento, es capaz de jugar a autodestruirse sin remedio montando escándalos allá donde va.
Amy canta como un ángel y gira por todo el mundo ampliando su fama. Y Amy es detenida por inventar pruebas falsas para exculpar a su marido.
Amy tiene la canción del momento, "Rehab", que habla de dejar el alcohol(!?). Y Amy aparece en un vídeo en una actuación llevándose algo a la nariz de forma más que sospechosa.
Amy gana premios en los concursos de la música más importantes ya sean Britts o Grammys, pero Amy sale en los periódicos por haber destrozado la habitación de su hotel...
Uno no termina de entender a esta gente que triunfa haciendo lo que más les gusta pero siguen pareciendo ser las personas más desgraciadas del mundo, incapaces de vivir su vida sin querer que acabe mañana. Y a veces da envidia ver tanto talento tan malgastado...

Amy cantará en Madrid en verano, dentro de la programación de Rock in Rio. Si ella está sana será posiblemente uno de los grandes conciertos de todo el festival. Pero creo que no voy a ir. Me conformaré con escucharla en los discos de estudio, que así no me decepcionará y seguirá pareciéndome una de las intérpretes más talentosas que he oído jamás.

Ahí os dejo uno de sus vídeos, "Back to black". Una joya:

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sentirse desgraciado no depende del éxito, sino de un inconformismo vital, a mi juicio no se puede entender el talento de alguien si le quitas aquello que le hace expresarse, aunque sea una agonía existencial...tu blog me parece muy bueno, escribes y te expresas de una manera muy agradable. Suerte

oligoqueto dijo...

Gracias.

La verdad es que no quería ligar el ser feliz con el triunfo profesional, pero releyendo el post sí puede entenderse así. Quería más bien decir que se supone que esta mujer se dedica a cantar porque es lo que más le satisface, y aun así parece que se autodestruye como si fuese muy desdichada. Y a mí ese tipo de inconformismos me resultan no solo incomprensibles, sino tambien un poco egoistas.

Pero me ha gustado mucho lo que dices. Es muy posible que parte de su grandeza artística esté efectivamente en ese sufrimiento. No lo había pensado así...

Un saludo.