miércoles, 8 de julio de 2009

Oportunidades

Lo había oído por la radio, a primera hora de la mañana. Que en septiembre saldría en la semana de la moda de Nueva York un nuevo diseñador español. Uno cuya principal curiosidad era que nunca antes había presentado su colección en la pasarela.

No le di mucha importancia, simplemente pensé "que bien, un tipo que ha conseguido llegar", imaginando que algún organizador de la feria habría visto su trabajo y, al verlo bueno, le habría facilitado un sitio en ella. Una de esas historias en plan "sueño americano", que tanto nos gustan...

Pero después leí el artículo, y fui indignándome poco a poco, al ver de que iba realmente la historia.

"Misterioso novato en Manhattan"

Resulta que esa idea tan bonita que yo me había creado al respecto era totalmente errónea.
El diseñador en cuestión no es que nunca hubiese presentado su colección, es que ni siquiera la había enseñado. Es más, dicen que sus modelos se colocan los trajes en las pruebas con los ojos cerrados, para evitar que alguien los vea, y ni siquiera los posibles compradores han accedido a ver las prendas terminadas.

¿Como entonces había conseguido esa oportunidad?


El artículo no deja espacio para pensar mal.
Directamente lo explica. Resulta que el chico, de 28 años, pertenece a una familia bien que vive entre Marbella y Madrid. Un chico que vivió desde los 11 hasta los 16 años en Estados Unidos, en una academia de tenis de Florida. Y que aunque estudió empresariales y su familia quería que fuera banquero, siempre supo que lo suyo era la moda.
Resulta también que en el consejo asesor de su firma está ni más ni menos que Covadonga O'Shea, cuñada del señor Botín y directora de Telva, y que el director de la empresa y, al parecer, máximo inversor, es el señor Ángel Sartorius Carvajal, dueño de una consultora de proyectos inmobiliarios relacionados con el golf. Nombres que, inevitablemente, huelen a dinero.

Y resulta que el joven opina, no sin cierta razón, que "En España se vive muy bien de la subvención, pero hay que ponerse a producir". Lo cual no es que sea una mala opinión, pero en su caso suena un poco a cachondeo.

Personalmente, sin mucha idea de moda, y sin haber visto su colección (evidentemente), me cuesta opinar sobre lo buen o mal diseñador que es. De hecho, no estoy muy seguro de que nadie opine sobre estos temas sin poner grandísimas dosis de subjetividad en la opinión, por lo que tampoco me molestaré demasiado en saber por otros si es bueno o malo.

Pero lo que sí está claro, más allá de que le salga bien o mal el negocio y de su propio esfuerzo personal, del que no dudo, es que las facilidades que ha tenido para ponerse en el mercado no las tiene un diseñador cualquiera. Que no es fácil conseguir dinero para un nuevo producto comercial, sin haberlo siquiera enseñado, como para encima conseguir financiación para empezar a lo grande.
Y que su opinión sobre las subvenciones, por acertada que resulte en muchos casos, no deja de ser una hipocresía, teniendo en cuenta que él quizás no tenga subvenciones, pero tiene sin duda ciertos mecenazgos que realmente no se sustentan en nada que haya producido todavía.

A veces, cuando se habla de la igualdad de oportunidades, pasamos por alto detalles así. Cómo esa igualdad es más falsa que un dolar con la cara del pato Donald cuando se compara a gente que ha tenido y tiene todas las facilidades para acceder a lo mejor con los hijos de gente que las pasa putas para subsistir.

Y cómo el sistema nos separa cada vez más, creando élites tan grandes y lejanas que parece imposible que sus proyectos, por descabellados que parezcan, tengan posibilidad de fracasar, perpetuando las riquezas.

7 comentarios:

Roberto Marchán dijo...

asín es, asín,... más que el hecho en sí, que es algo que pasa todos los días y en todos los campos, me sorprende que esto se considere noticia en un medio serio y supuestamente independiente. esto no es una noticia, es pura publicidad. qué otras relaciones familiares tiene este tipo en prisa o en el país??? y hablando del clan sartorius, algún día te contaré las anécdotas que tiene mi suegra de cuando trabajaba para uno de ellos,... dignas de la oficina del botones sacarino. aún a riesgo de parecer resentido, qué ascazo,... y pensar que lo más parecido que existe en el mundo a una verdadera meritocracia es estados unidos,... ahora mismo me voy a escuchar a john fogerty cantando el "fortunate son".

un abrazo!!

Jove Kovic dijo...

No puedo hacer otra cosa que manifestar mi completo acuerdo con el fondo y con la forma del post. Excelente apunte de la realidad española.

Anónimo dijo...

Hoy en día no hay noticias importantes, sino un target de publico potencial que se merienda las noticias basura como si fueran jamón serrano.

Roberto Marchán dijo...

sigo indignado, no será todo esto una gran coña a lo baron cohen???? de los 11 a los 16 años en una academia de tenis de florida???? mmm, raro, raro, raro o la realidad supera a la ficción

oligoqueto dijo...

Puedo confirmar y confirmo que no es una coña. Para redactar el post invetigué un poco al personaje, e incluso encontré por ahí su teléfono móvil... si quieres te lo paso por vía privada y le llamas para preguntar...

Jovekovic, saludos cordiales, no?

Jordim, me preocupa ser target de esto, la verdad. Al fin y al cabo no solo leí la noticia sino que le he hecho un post...
Espero al menos ser también target de otras cosas mejores...

Jove Kovic dijo...

...desde BCN ( faltaría más, jajajajaja)

Anónimo dijo...

hola Roberto,
cuentanos un poco por favor, que estoy interesado