viernes, 27 de marzo de 2009

Conciencia pre-messenger.

Pertenezco a una generación pre-messenger, una que se crió sin internet (que no sin ordenadores), que hizo su carrera (la primera al menos, la segunda me pilló en medio) sin saber lo que significaba tener acceso a casi cualquier dato a través de la red, sin conocer el significado de la información inmediata. Y eso lo quieras o no, es una marca a fuego...

No soy tan viejo, ni muchísimo menos. Creo que cursaba 3 de carrera en biología cuando empecé a tomar contacto con internet, aunque nunca fue una referencia válida para hacer trabajos allí, en la universidad. Ni era una herramienta tan sobrecargada de datos como es hoy en día.
Y en casa debo tener una conexión rápida a la red desde algo así como el año 98, por lo que casi soy de los pioneros del ADSL...
Pero intentar compararme con chavales a los que saco cinco o diez años es como comparar una PDA con un tamagotchi, no hay por donde cogerlo. Lo que ellos han mamado, todo ese mundo de datos interrelacionados, esa forma diferente de comunicarse, como si el messenger o el Facebook fuesen parte intrínseca de su conexión al mundo... es algo que, honestamente, me supera.

Tampoco es que me niegue al uso de la tecnología, ni mucho menos. Trabajando en lo que trabajo, estoy muy acostumbrado a mantenerme al día con los avances del mundo. Y ya he dejado en este mismo blog alguna apuesta sobre el futuro que nos espera.
Es simplemente que no entiendo esa forma de interactuar con los demás. Y puede resultar curioso en una persona que escribe un blog, paradójico tal vez. Pero es que conozco ejemplos de gente que emplea el messenger para hablar entre si estando a pocos metros de distancia, como si fuese una ramificación más de su cuerpo que les permitiera seguir en contacto con otros aun cuando estén centrados en cualquier otro asunto. Y en cierta forma me asusta.

Comentando el tema el otro día con una de mis mejores amigos, nos dimos cuenta de hasta que punto ha cambiado el mundo. Como el me dijo, a veces las máximas virtudes de las cosas son también la raíz de sus mayores defectos. Y sospecho que esa capacidad de conectar las cosas que tiene internet nos está convirtiendo poco a poco en individuos demasiado dependientes del resto. Con lo bueno y malo que eso tiene.

Y por otro lado, yo le comenté lo que aparecía en la firma de una bloggera a la que conozco, exactamente:
"Navegar demasiado por Internet puede reducir tu capacidad de atención a 9 segundos. La misma que tiene un pez de colores.

Ted Selker en un informe para la BBC."
Otra pequeña muestra de como la inmediatez a la que nos hemos habituado nos está haciendo perder algunas cualidades (y cualquiera que tenga contacto con gente joven sabe hasta que punto tienen dificultades de concentración y falta de paciencia)...

No sé, igual algún día me convierto en legión, y entro de lleno en el mundo del Facebook que tan poco me llama, o me vuelvo a abrir una cuenta del messenger, como cuando la necesitaba en mi segunda carrera para hacer trabajos de grupo (poco uso le he dado fuera de eso).
Pero por ahora lo observo todo un poco desde fuera, con la objetividad de conocer lo que me rodea casi de forma obligada y el desapasionamiento receloso del que no le encuentra utilidad y en cambio si le encuentra fallos.

El tiempo dirá...

9 comentarios:

Samsa dijo...

jajajaja, yo no se que sería mi vida sin el msn, sobre todo para conocer a la gente, no me imagino por mi carácter llamando asiduamente a alguien que me resulte interesante la verdad...

Alice_Gould dijo...

Yo que uso redes sociales, y el msn nuestro de cada día:

En mi experiencia puedo decir que todas estas herramientas favorecen la creacion de relaciones efimeras, de esas que borrar con un solo click (de esto Bauman sabe mas que yo)...pero como herramienta que es depende del uso que le demos, y mis mejores amigos los he conocido gracias a internet.
Tengo tantos buenos amigos de las redes sociales clasicas (colegios, ciudad, familia...) como de las redes modernas (foros, msn, facebook...)

De internet lo que mas me hace pensar son:
-Sitios como Facebook (en el que soy usuaria); por la cantidad de informacion que tienen sobre nosotros y las posibilidades de ser usada con cualquier objetivo al que no nos hemos prestado.
-La Wikipedia, no por ella misma, que normalmente es muy util, sino porque cuando buscas cualquier dato los 15 primeros resultados son copias de esta base de datos, y poder contrastarlos es cada vez mas dificil dentro de la red.

oligoqueto dijo...

Samsa: Sí, puede ser, pero a la vez puede resultar muy mentiroso... Está claro que el alejamiento físico ayuda a desinhibirse, pero también lo es que el lenguaje físico es importante para conocer a alguien de verdad.

Alice Gould: Entiendo lo de las relaciones efímeras, pero no es algo que me atraiga especialmente. Prefiero conocer a poca gente pero conocerla bien. Parte de mi carácter tímido y desconfiado.
Lo que sí que es innegable es que abre mucho el abánico de gente a la que tienes acceso. Y que las herramientas sociales suelen agrupar gente en torno a algo, por lo que permiten conocer a personas muy afines que de otra manera no llegarías a encontrar jamás.

Facebook no me gusta nada. Tengo un perfil anónimo que solo empleo para cotillear. Y yo no lo hago con malicia, así que me asusta saber como lo usará quién sí sea un mal bicho.
Wikipedia: Tienes razón, el hecho de que cualquiera pueda aportar es muy bueno y muy arriesgado. Alguna vez he encontrado datos incorrectos en temas que domino. Aunque al mismo tiempo abre la puerta a limitar el control de algunos sobre la información.
En mi carrera de Biología (acabé en 2001 y las cosas pueden haber cambiado) uno no podía acudir a Internet como fuente de un trabajo. Pero a la vez se nos comentaba que a veces la publicación en revistas científicas tenía muchas dificultades, y que cierto politiqueo no venía mal. Y eso plantea dudas sobre lo que al final sale.

Es curioso, tenía el post escrito desde enero y no sé que me había parado para lanzarme a publicarlo.
Pero me están gustando los comentarios...

Saludos.

Cyllan dijo...

Yo también me crié fuera de esta vorágine de información y comunicación global. Creo que no nos hace eso muy diferentes la verdad. Cada uno es como es. Por ejemplo, yo usé muchísimo msn hace un tiempo porque necesitaba conseguir algo muy importante en una etapa difícil de mi vida. Lo importante es que lo usé como un "medio", no como un "fin" en si mismo. Entonces cuando dejé de necesitarlo lo abandoné. El problema de la gente que dices que está muy cerca y se habla a través de msn, o chats, etc es que lo usan como un fin. No creo que eso sea porque has tenido esto desde que eras pequeño o no, depende de las personas. En cualquier caso creo que tú y yo tenemos menos papeletas para convertirnos en un pez de colores :P

El facebook y demás redes sociales me dan de patadas. Lo usé para ver lo que era, por probarlo todo ya sabes, y al poco tiempo me borré horrorizada :/ Me parece que sólo son los sustitutos de las agencias matrimoniales o algo así jajaja, son grandes escaparates para ligar, juas.

Besos pre-msn.

Jove Kovic dijo...

Yo me crié más fuera que nadie de las nuevas tecnologías, supongo que por eso me parecen tan interesantes en algunos aspectos. Dicho esto, está claro que nunca deben sustituir a la cañita con los amigos, o el cine en pantalla grande - por ejemplo-.
Saludos cordiales desde BCN.

PD: Interesante reflexión, viniendo como viene de un "científico".

Roberto Marchán dijo...

Estoy completamente de acuerdo, ya lo sabes ;-). Yo solamente añadiría una cosilla. Como bien comentan allí arriba, todas estas cosas no son más que "herramientas", y como tales dependen del buen o mal uso que se haga de ellas. Pero no debemos olvidar que son herramientas enormemente complejas, como todas las vinculadas a la informática. De forma parecida a como decía Marx que "la acumulación de cambios cuantitativos implica un cambio cualitativo", también creo que la complejidad de las herramientas exige tal grado de especialización en el conocimiento de las mismas que se limitan o al menos se condicionan otras capacidades del sujeto (me refiero, por ejemplo, a esa falta de concentración de la que hablas). Y negar esto es absurdo. Todo avance tiene muchas cosas positivas, pero siempre es a cambio de perder otras, teóricamente menos o de menor importancia (si no fuera así no lo llamaríamos "avance"), pero siempre se pierden cosas.

Un abrazo!

oligoqueto dijo...

Cyllan: Entiendo lo que quieres decir, pero para mí no es tanto que sea un fin o un medio. Al final sigue siendo un medio, porque el fin no es usar la herramienta, sino comunicarse con otro.
Lo que pasa es que donde para unos es preferible un medio u otro, hay mucha gente que se ha criado con una tecnología tal que lo natural para ellos es emplearla. Y eso supone un verdadero cambio en la forma de pensa y actuar.

Jovekovic: Sí, interés todo el del mundo. Pero a veces me parece que la gente se olvida de que hay cosas más allá de la pura tecnología. La cual, por otro lado, defiendo intensamente como motor de avance siempre que se use bien y no se nos olvide la bondad de lo que ya tenemos.

Roberto: Y de nuevo, sí, tienes razón. Pero es preciso contemplar los avances y situarlos en perspectiva para emplearlos de la mejor manera, o se corre el riesgo de perder cosas irrecuperables.

Saludos.

Chesterton dijo...

Y, en definitiva, no es todo este post una enorme paradoja???

oligoqueto dijo...

No, no del todo.
Sí, puede ser...

Saludos.