lunes, 10 de noviembre de 2008

The Women

Hacía mucho tiempo que no iba a ver una película de la que no supiera nada, y en esta ocasión me dejé llevar a ver "The Women". Y la verdad es que no está mal, resulta interesante ir dejando que la historia te entre por los ojos sin tener ni idea de por donde va a saltar; aunque la película tampoco es una joya del cine, resulta entretenida sin más, de viernes noche, para no pensar en nada. Tengo entendido que la original de George Cukor de 1939, que desconozco por completo, era muy buena, y he visto alguna crítica que despedaza esta en función de aquella, pero bueno, me limitaré a comentar lo que vi...

Y lo cierto es que no me es fácil hacer la crítica de una película así. Porque una película como "The Women" no solo tiene a las mujeres en el título, sino que aparecen en todas y cada una de sus escenas y las tiene sin duda como público objetivo. En cierta forma es como si hubiesen cogido "Sexo en Nueva York" y le hubiesen quitado cualquier retazo de varón que pudiera haber en la serie (en esta película los hombres hemos sido borrados, como si de una presencia molesta trataramos, y no aparecemos en ningún plano).
Y no es que eso me haga incapaz de empatizar con las vivencias del grupo de personajes protagonistas, pero tampoco me sale de forma natural. Es como el dolor de útero o el parir, puedo comprender e intentar asimilar lo que supone la experiencia, pero jamás lo viviré, y cualquier cosa que imagine al respecto siempre quedará lejana. Y aunque en este caso la mayoría de las situaciones sean simplemente emocionales, no dejan de estar planteadas y vividas desde un punto de vista absolutamente femenino, por lo que me resultaron en ocasiones un tanto ajenas.
No tengo claro si el machismo que impera en el mundo hace que las vidas de las mujeres lleven siempre ese tipo de sensación asociada, como si estuviesen en un mundo que no está hecho para ellas, sino para sus vecinos masculinos, pero no creo que me gustara que la experiencia fuese duradera...

En cuanto al reparto, detecté ciertos problemas a la hora de escoger a las actrices protagonistas, que están desajustadas, desequilibradas y nunca dan una clara sensación de grupo de amigas. Aunque Meg Ryan y Annette Bening pretendan ser de la misma edad, las operaciones de una y la naturalidad de la otra chocan, y cualquiera diría que si llevaban juntas desde la universidad la primera debía ser alumna de la segunda. En la vida real solo son tres años de diferencia, pero Annette Bening ya no parece una cuarentona (tiene 50 años, bien llevados por otro lado), y Meg Ryan da un poco de grima detrás de esa cara que se ha puesto (tiene unas 50 operaciones muy poco creibles). Solo Debra Messing, protagonista de la serie televisiva "Will & Grace", está en la edad que se les supone a los personajes (los 40, más o menos), mientras Jada Pinkett Smith, la mujer de Will Smith, pese a tener 37 años parece más joven...

Aun así la película me entretuvo, y me pareció bastante divertida a ratos. Contiene escenas muy graciosas, y hay algún personaje que me pareció especialmente entrañable (el papel de Candice Bergen, o el de la asistenta de Meg Ryan, por ejemplo). Aunque sea una película para ellas, la verdad es que todos los personajes principales son meras caricaturas, roles muy tópicos sacados de quicio que se reconocen fácilmente y parecen sacados de otras películas. Desde la fría triunfadora hasta el putón mantenido, pasando por la que solo sabe ser madre... Y para sacar jugo a los personajes, son todas mujeres ricas y con cierto éxito social que se enfrentan, con el paso de los años, a las crisis femeninas más típicas y vistas, con lo que eso otorga de versatilidad a los guionistas y a la vez resta de originalidad a los espectadores. Por eso, pese a que muchas de sus vivencias sean tan femeninas, tampoco se hace insondable para un pobre hombre como yo, y también se deja disfrutar.

Por lo demás, nada especialmente destacable en cuanto a dirección, música, fotografía... Todo dentro de la típica corrección de las películas de este tipo.
Se puede decir, para resumir, que tiene momentos buenos, y te hace salir del cine con una sonrisa. O al menos sin pensar que has visto algo horrible. Así que, sin ser nada especialmente memorable tampoco resulta en absoluto desaconsejable.
Ahora bien, no es de las que hay que ver en el cine sí o sí; en casita, tranquilamente, en vídeo, más que suficiente...

Ya me diréis...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Te tragas cada cosa...