martes, 3 de febrero de 2009

Valkiria.

El 20 de julio de 1944, el coronel Claus Von Stauffenberg, miembro del Estado Mayor del ejército alemán que había quedado lisiado en sus misiones militares en África, ejecutó un atentado contra la vida del Fuhrer que casi consigue culminar con éxito. De los preparativos que se realizaron para llevar a cabo aquel intento de golpe de estado, y de como se sucedieron los acontecimientos después, trata la última película de Bryan singer, "Valkiria", interpretada por Tom Cruise.


Yo no sé si a vosotros os pasará lo mismo, pero últimamente cada vez me es más difícil ver películas protagonizadas por Tom Cruise. Me cae mal, y cuando saca algo nuevo no puedo evitar relacionar su obra con él mismo. Y claro, todo sale malparado.
En este caso, me fui con la sensación de que Tom no aportaba gran cosa, y que había escogido el papel pensando en la grandeza que podía darle, sin darse cuenta de lo pequeño que quedaba ahí dentro. Como si hubiese escogido a un héroe tullido como medio para ampliar su fama, y todo ello hubiese quedado reducido a su propia altura personal.
Imagino que será el precio que paga por la estúpida publicidad que ha hecho de si mismo, relacionada con la cienciología...
Y en esta película, a pesar de algunas virtudes, me quedé bastante frío al verla. No es por plagiar a Carlos Boyero, pero lo cierto es que casi cualquier cosa que pudiera decir de ella ya las expuso él en su crítica de "El País".

Aun así, de cara a hacer este pequeño post, me he empapado un poco de lo que cuenta la película y de las vidas reales que en ella aparecen. Y he de admitir que resultan muchísimo más interesantes que la propia narración que nos presenta Bryan Singer. Quizás por lo que dice Boyero, porque no se puede hacer una supuesta intriga de algo que sabes no solo como acabó, sino incluso de que forma se llegó a ese fin. O quizás porque, puestos a conocer sucesos históricos, son más interesantes cuando no se presentan envueltos en una pomposa forma de reverenciar al actor protagonista de la película, sino en una forma más objetiva de narrar la vivencia del personaje.
Por eso, las virtudes que digo que tiene el film están todas relacionadas con lo que implica el ser fiel a como sucedieron las cosas, por cinematográficas que puedan resultar.

Von Stauffenberg fue un tipo curioso, de profundas creencias progermánicas. Su odio hacia Hitler, y su decisión de acabar con su vida, parece que tenían mucho que ver tanto con su desprecio por la forma salvaje de actuar del ejercito alemán, en casos de genocidio y diversos exterminios, como con sus propios conocimientos militares y su desaprobación de las tácticas del Fuhrer, especialmente sus fallos en Rusia.
Pero, aunque quizás no con raíces racistas, sí que parecía creer en la superioridad del pueblo alemán, tal y como muestra su "Juramento", y consideraba que Alemania debía quedar por encima de lo que el régimen nacionalsocialista podía conseguir. Y es muy probables que sea en ese contexto en el que se deban analizar sus actos, entendiendo que incluso estuvo dispuesto a participar en un atentado suicida para librar a Alemania del desastre al que la llevaban los nazis.

Considerando todo lo visto y leído, solo puedo decir que la película se deja ver sin más, y que es una lástima que no se encontrara una mejor forma de narrar una situación histórica que merece mucho la pena conocer.
Pero como en realidad no hace falta ir al cine para conocerla y la película tampoco aporta nada especial para ser llamativa por si misma, no veo motivos especiales para recomendarla.
Así que ya sabéis, solo para un último caso, y si no se encuentra nada mejor en la cartelera (algo complicado dado lo cercanos que quedan los Oscar). Para emplear dos horas, mejor leerlo todo en la Wikipedia...
Que la disfrutéis.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Parece que la pelicula realmente esta valiendo para que la historia salga a la luz y mas gente quiera conocerla, los mas con la version cinematografica y para los curiosos indagando en la enciclopedia (wiki tambien).


Asi que es una pelicula que cumple su cometido...o al menos uno de ellos (supongo que por eso has creido que era merecedora de un post, ya que cinematograficamente parece que no te ha entusiasmado, ni mucho menos).

oligoqueto dijo...

La verdad es que creo que su cometido está destinado a la mayor gloria de Tom Cruise, y en ese aspecto...

Lo siento, tengo prejuicios hacia la película por mis juicios sobre el señor Cruise. Pero si lo que se puede leer de la historia real es más emocionante que la propia película, algo falla.
Y tienes razón, lo mejor es que me ha motivado indagar más en la historia.

Lo del comentario... siempre comento todas las películas que veo en el cine, me gusten o no. Así cumplo con uno de mis mayores hobbies y también con el blog...

Saludos.

Anónimo dijo...

Como dijo Jack el Destripador: vayamos por partes...

Tom Cruise: ya he acabado todo lo que tenía que decir sobre él.

Hecho histórico: no dudo de la consternación causada al conocerse las atrocidades genocidas en el seno del ejército alemán, ni del malestar que suponía la prohibición de retroceder en el campo de batalla bajo pena de consejo de guerra, pero no comparto que estos fueran los únicos motivos para orquestar el magnicidio.

En mi opinión, los grandes mandos del ejército nazi (aristocracia prusiana) siempre sintieron un evidente desprecio por todo aquel que careciera de su rancio abolengo, Hitler incluido, al que despectivamente llamaban "ese hijo de un zapatero remendón vienés".
Así que llegado el momento no moverían un dedo por él.

Paradójicamente fue Rommel, la figura más popular de Alemania en ese momento tras el propio Führer y primer miembro del Estado Mayor General (OKW) de origen no aristocrático, quien pagó con su vida el fracaso de este atentado, en cuyo complot no participó activamente.

Anónimo dijo...

La peliícula es entretenida, aunque no quería verla por que tom cruise me parece de una estupidez subida de tono. Yo sí la recomendaria.